¡Hola a todxs!
Bienvenidos otra semanita más al blog. Hoy vamos a empezar con las mononeuropatías, que a lo mejor no os suenan mucho, pero estamos aquí para aprender, así que allá vamos.
Para situarnos, lo primero que debemos saber es que una mononeuropatía aparece cuando el daño a un único nervio deriva en la pérdida de sensibilidad, movilidad u otra función de dicho nervio. Suelen ser causadas por lesiones, aunque algunas enfermedades sistémicas (aquellas que afectan a todo el organismo) pueden también producir una mononeuropatía.
Si bien esta afección puede presentarse en cualquier parte del cuerpo, los tipos más comunes son la disfunción del nervio axilar, que afecta al hombro; la disfunción del nervio peroneo común, relacionada con la pérdida de sensibilidad en el pie y la pierna; la mononeuropatía del VI par craneal, que resulta en visión doble y finalmente el síndrome del túnel carpiano, que muchos ya conoceréis y que afecta a la mano. De las que acabo de mencionar, la última es posible que sea de las más comunes en nuestro entorno, pues no es raro conocer a alguien que la padezca hoy en día.
Y hasta aquí la entrada de las mononeuropatías. Ha sido bastante corta, ¿verdad?
¡Nos leemos pronto!
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